Eine zweite kleine Geschichte

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  • Ersteller
    Thema
  • #715373
    Rea
    Teilnehmer

      Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamete en coro.

      (editiert aufgrund wundervollen Verbesserungsvorschlags von cuya)

      [EDIT by Tao:] Habe das mal geteilt und als neues Thema aufgemacht, damit alle es mitkriegen und die andere schön abgeschlossen stehen bleibt 🙂

    Ansicht von 20 Antworten - 21 bis 40 (von insgesamt 78)
    • Autor
      Antworten
    • #748993
      Helga
      Teilnehmer

        Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamente en coro.
        Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
        Se pusieron entre si de acuerdo, quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
        No debería haber ruido a esta hora – ¡Aquí no! ¡No en este lugar!
        Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
        Se decidió, que Emilio debería ir al bosque, porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia, miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado, animales enfermos para matar. Tenía que matar dos animales. Desde generaciones¸se podría sólo con permiso de los ancianos.
        Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado para matar animales enfermos. Tenía que matar
        dos animales.
        Esto dijo el forastero y sus palabras a empujones, el miedo estaba aún escrito en su cara.
        El cazador andaba a la búsqueda de un corzo herido aún, que lo quería salvar. Los ancianos veían su miedo y no comprendían
        sus palabras .De repente saltó un corzo de los arbustos, el cazador levantó su escopeta y disparó dos veces.

        Los ancianos cercaron al cazador, sus ojos se reflejaban el dolor e incomprensión. Los ancianos no podían
        entender por qué el cazador había dispertado y perturbaba así su paz y tranquilidad.
        _________________

        #748992
        Helga
        Teilnehmer

          Ich stelle die Geschichte wieder richtig zusammen.

          Danke cuya für die Korrektur.

          Un saludo

          Helga

          #748991
          Rea
          Teilnehmer

            Gracias!

            #748990
            Anonym

              …, en sus ojos se reflejaba dolor e incomprensión.

              Ja, wenn ich mir das genau ansehe, hätte ich se reflejaban schreiben müssen/sollen, denn 2 Sachen wiederspiegeln sich. Aber ich meine, man kann auch “dolor e incomprención” als ein “Gesamtbild/Erscheinung/Zustand ” ansehen und dann könnte man den Singular nehmen. Wahrscheinlich ist es im Deutschen ähnlich…

              cuya

              #748989
              Rea
              Teilnehmer

                Gracias cuya, ich hatte überlegt, ob sich beide widerspiegeln oder jedes sich widerspiegelt, bin noch am überlegen, ob es eine eindeutige Regelung im Deutschen gibt.
                Ist es auf spanisch eindeutig geregelt?

                Liebe Grüße
                Rea

                #748988
                Anonym

                  Hier ein paar Verbesserungs Vorschläge:


                  Esto dijo el forastero y hablaba a empujones, el miedo estaba aún escrito en su cara.
                  El cazador andaba a la búsqueda de un corzo herido , que quería salvar. Los ancianos veían su miedo y no comprendían
                  sus palabras .De repente saltó un corzo de los arbustos, el cazador levantó su escopeta y disparó dos veces.
                  Los ancianos cercaron al cazador, en sus ojos se reflejaba dolor e incomprensión. Los ancianos no podían entender por qué el cazador había disparado y perturbaba así su paz y tranquilidad.

                  cuya

                  #748987
                  Helga
                  Teilnehmer

                    Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamente en coro.
                    Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
                    Se pusieron entre si de acuerdo, quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
                    No debería haber ruido a esta hora – ¡Aquí no! ¡No en este lugar!
                    Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
                    Se decidió, que Emilio debería ir al bosque, porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia, miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado, animales enfermos para matar. Tenía que matar dos animales. Desde generaciones¸se podría sólo con permiso de los ancianos.
                    Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado para matar animales enfermos. Tenía que matar
                    dos animales.
                    Esto dijo el forastero y sus palabras a empujones, el miedo estaba aún escrito en su cara.
                    El cazador fue a la búsqueda de un corzo herido aún, que lo quería salvar. Los ancianos veían su miedo y no comprendían
                    sus palabras .De repente saltó un corzo de los arbustos, el cazador levantó su escopeta y disparó dos veces.

                    Los ancianos cercaron al cazador, sus ojos reflejaban el dolor y la incomprensión. Los ancianos no podian entender por qué el cazador dispertó y perturbaba su paz y tranquilidad.
                    _________________

                    #748986
                    Rea
                    Teilnehmer

                      @Helga wrote:

                      Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamente en coro.
                      Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
                      Se pusieron entre si de acuerdo, quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
                      No debería haber ruido a esta hora – ¡Aquí no! ¡No en este lugar!
                      Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
                      Se decidió, que Emilio debería ir al bosque, porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia, miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado, animales enfermos para matar. Tenía que matar dos animales. Desde generaciones¸se podría sólo con permiso de los ancianos.
                      Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado para matar animales enfermos. Tenía que matar
                      dos animales.
                      Esto dijo el forastero y sus palabras a empujones, el miedo estaba aún escrito en su cara.
                      El cazador fue a la búsqueda de un corzo herido aún, que lo quería salvar. Los ancianos veían su miedo y no comprendían
                      sus palabras .De repente saltó un corzo de los arbustos, el cazador levantó su escopeta y disparó dos veces.

                      Los ancianos cercaron al cazador, sus ojos reflejaban el duelo y la incomprensión.

                      #748985
                      Helga
                      Teilnehmer

                        Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamente en coro.
                        Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
                        Se pusieron entre si de acuerdo, quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
                        No debería haber ruido a esta hora – ¡Aquí no! ¡No en este lugar!
                        Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
                        Se decidió, que Emilio debería ir al bosque, porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia, miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado, animales enfermos para matar. Tenía que matar dos animales. Desde generaciones¸se podría sólo con permiso de los ancianos.
                        Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado para matar animales enfermos. Tenía que matar
                        dos animales.
                        Esto dijo el forastero y sus palabras a empujones, el miedo estaba aún escrito en su cara.
                        El cazador fue a la búsqueda de un corzo herido aún, que lo quería salvar. Los ancianos veían su miedo y no comprendían
                        sus palabras .De repente saltó un corzo de los arbustos, el cazador levantó su escopeta y disparó dos veces.

                        #748984
                        Rea
                        Teilnehmer

                          @Helga wrote:

                          Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamente en coro.
                          Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
                          Se pusieron entre si de acuerdo , quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
                          No debería haber ruido a esta hora – ¡Aquí no! ¡No en este lugar!
                          Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
                          Se decidió, que Emilio debería ir al bosque, porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia, miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado, animales enfermos para matar. Tenía que matar dos animales. Desde generaciones¸se podría sólo con permiso de los ancianos.
                          Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado para matar animales enfermos. Tenía que matar
                          dos animales.
                          Esto dijo el forastero y sus palabras a empujones, el miedo estaba aún escrito en su cara.
                          El cazador fue a la búsqueda de un corzo herido aún, que lo quería salvar. Los ancianos veía su mieda y no comprendaba sus palabras.

                          #748983
                          Helga
                          Teilnehmer

                            Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamente en coro.
                            Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
                            Se pusieron entre si de acuerdo , quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
                            No debería haber ruido a esta hora – ¡Aquí no! ¡No en este lugar!
                            Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
                            Se decidió, que Emilio debería ir al bosque, porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia, miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado, animales enfermos para matar. Tenía que matar dos animales. Desde generaciones¸se podría sólo con permiso de los ancianos.
                            Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado para matar animales enfermos. Tenía que matar
                            dos animales.
                            Esto dijo el forastero y sus palabras a empujones, el miedo estaba aún escrito en su cara.
                            El cazador fue a la búsqueda de un corzo herido aún, que lo quería salvar.

                            #748982
                            Helga
                            Teilnehmer

                              !Hallo cuya,

                              muchas gracias!

                              Un saludo Helga

                              #748981
                              Anonym

                                la mieda gibt es nicht, dafür la mierda 😆 😳 😉
                                Also hoffe ich, das verwechselst Du nicht mehr…
                                Ich verwendete “estar escrito en la cara ” denn es hört sich besser an (imho)
                                cuya

                                #748980
                                Rea
                                Teilnehmer

                                  Vielleicht merk ich mir mal, dass die Angst im Spanischen männlich ist!! 😆 😆
                                  gracias!

                                  #748979
                                  Anonym

                                    … desde generaciones; se podía entrar sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado para matar animales enfermos . Tenía que matar dos animales.
                                    Esto dijo el forastero y sus palabras venían a empujones, el miedo estaba aún escrito en su cara.

                                    #748978
                                    Rea
                                    Teilnehmer

                                      @aha38 wrote:

                                      Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamete en coro.
                                      Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
                                      Se pusieron entre si de acuerdo , quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
                                      No debería haber ruido a esta hora – ¡ Aquí no ! ¡No en este lugar!
                                      Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
                                      Se decidió,que Emilio debería ir al bosque,porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia,miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado, animales enfermos para matar. Tenía que matar dos animales.

                                      Esto dijo el forastero y sus palabras venían empujones, la mieda no apartaba de su cara.

                                      #748977
                                      aha38
                                      Teilnehmer

                                        Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamete en coro.
                                        Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
                                        Se pusieron entre si de acuerdo , quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
                                        No debería haber ruido a esta hora – ¡ Aquí no ! ¡No en este lugar!
                                        Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
                                        Se decidió,que Emilio debería ir al bosque,porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia,miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado, animales enfermos para matar. Tenía que matar dos animales.

                                        #748976
                                        Helga
                                        Teilnehmer

                                          Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamete en coro.
                                          Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
                                          Se pusieron entre si de acuerdo , quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
                                          No debería haber ruido a esta hora – ¡ Aquí no ! ¡No en este lugar!
                                          Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
                                          Se decidió,que Emilio debería ir al bosque,porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia,miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos. Normalmente sí, pero el cazador tenía un permiso del estado, animales enfermos
                                          para matar.

                                          #748975
                                          Anonym

                                            En este bosque no cazaban desde generaciones; se podía entrar sólo con permiso de los ancianos.

                                            cuya

                                            #748974
                                            Rea
                                            Teilnehmer

                                              Cuando cayó el rocío y los pájaros despertaron, los ancianos se sentaron silenciosamete en coro.
                                              Lo hacían cada mañana para meditar. Era un día maravilloso, el tiempo era bueno, hacía sol. Todo parecía perfecto, pero de repente se oyó un ruido. Provenía de la selva tras ellos.
                                              Se pusieron entre si de acuerdo , quien debería ir al bosque para investigar lo del ruido.
                                              No debería haber ruido a esta hora – ¡ Aquí no ! ¡No en este lugar!
                                              Pasaron 10 minutos hasta que se pusieran de acuerdo.
                                              Se decidió,que Emilio debería ir al bosque,porque era el más fuerte y ágil de todos.Mientras Emilio entraba vacilante al bosque, los otros esperaban con una mezcla de rabia,miedo y curiosidad. Ya no se oía el ruido, solamente el chasquido de las ramas. De repente dominaba una tranquilidad absoluta, no se oía ningún pájaro. Un grito horrible rompió el silencio. Un cazador con una escopeta andaba furtivamente por el bosque. Este cazador no era de nuestro pueblo, en su cara reflejaba braveza y miedo. Era cadavérico. Emilio se preguntaba, ¿que busca el cazador en nuestro bosque? En este bosque no cazaban desde generaciones; estaba entrado sólo con permiso de los ancianos.

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